Voy aún más allá.
Todos justificamos cosas reprobables, en la medida que fluyen a favor de nuestros pequeños y mezquinos intereses.
No me digas que no porque de lo contrario quedas peor que las viejitas esas.
Te digo que no y con mucha propiedad, porque yo soy leal a valores y pricipios, y jamás he sido ni seré obsecuente para defender criminales. Y si mañana un hijo mío comete un delito, pues que lo juzguen y que enfrente las consecuencias de sus actos, pero yo no voy a ocultarlo ni a ayudarle a eludir la ley.
No tienes base alguna para adjudicarme características que para ti son "normales". Parece que tu normalidad es bastante más relajada que la mía.
No estoy hablando de asesinato, sino de la generalidad de las cosas reprobables. Yo no lo apruebo tampoco.
