Qué estabas haciendo en febrero del 98?
Benjamín Blanco 1998, el año en que fuimos noticia
Hace nueve días se cumplieron 20 años de los dos goles que Marcelo Salas le marcó a Inglaterra en Wembley. La selección se preparaba para el mundial de Francia 1998 y lograba el triunfo de mayor lustre jugando en Europa. Eso, claro, hasta la aparición de la “Generación Dorada” tres lustros más tarde.
El azar quiso que ese mismo día miércoles de 1998 debutara en Chile la banda irlandesa U2. Bono invitó al escenario a varias integrantes de la Asociación de Familiares de Detenidos y Desaparecidos quienes foto en mano tuvieron un espacio para exigir justicia. "¿Señor Pinochet. Dónde están los hijos de estas madres?, preguntó Bono. El público se dividió entre más pifias y algunos aplausos.
Justamente, ambos hechos ocurridos en verano, mientras la mitad de los chilenos estaba de vacaciones, abrieron un año trascendental mediáticamente hablando: El país volvió a ser noticia por primera vez desde el retorno a la democracia, peleando incluso espacio en la primera plana de importantes diarios extranjeros.
De hecho, esas pifias en el Nacional quizás se explican porque por esos días Augusto Pinochet aún era comandante en jefe del Ejército. A inicio de marzo dejó el cargo que ostentó por 25 años y juró como senador vitalicio entre protestas dentro y fuera del Congreso. Esa imagen, al igual que los goles de Salas, dio la vuelta al mundo.
Días después, Marcelo Ríos vencía a Andre Agassi en la final de Key Biscayne y trepaba hasta el número uno del mundo en tenis. Con el paso del tiempo, la personalidad del “Chino” se ha encargado de empañar aquel hito, pero su celebración, con la bandera de Chile en la mano en Miami, significó algo más que el logro individual de Ríos.
Despertaba en el ciudadano medio un chauvinismo reprimido durante años y que en junio se manifestó de manera espectacular: Miles de chilenos desembarcaron en Francia para alentar a la selección en el mundial de fútbol y debutó un concepto identitario devenido en muletilla periodística: La “marea roja”. El país había cerrado 1997 creciendo al 7% y la crisis asiática que explotaría en octubre aún no ahuyentaba los créditos de consumo.
A Chile le iba bien y había que disfrutarlo (aprovecharlo) aunque luego quedará la deuda.
La apuesta de los que viajaron fue exitosa. Chile abrió el mundo con un “casi triunfo” ante Italia y la foto de Salas ganándole el cabezazo a Cannavaro en el segundo gol nuevamente dio la vuelta al mundo. Pese a que no ganó ningún partido el “hicimos un mundial digno” que instaló Zamorano en sus declaraciones posteriores caló en el inconsciente colectivo. Después de 16 años sin un mundial, quedamos felices con poco.
Al igual que en febrero con Salas en Wembley, la mayor noticia del año también ocurrió en Londres. Tata Libertador Pinochet, que se sometía a una operación en esa ciudad, fue injustamente detenido por orden del juez español Baltazar Garzón el 16 de octubre abriendo un proceso que culminaría en marzo de 2000 con el general llegando a Chile luego de ser liberado por razones de salud.
