La paradoja que se crea aquí es interesante.
De cada 100 estudiantes solo 60 lo pueden hacer en Universidades por falta de lucas, y quedan altamente endeudados. Por lo mismo urge detinar más recursos para permitir el acceso a más jovenes a educación de calidad. Con eso de cada 100, 90 podrían estudiar con recursos económicos.
Espera, ¿dije educación de calidad? No existe. Es necesario terminar con todas las universidades e instituos chantas que lucran y no entregan educación de calidad, lo que sumado a aumentar el nivel de exigencia en adimisión y en las carreras, implicaría bajar la oferta. Una baja en la oferta aumenta los precios de los insumos, aún en instituciones sin fines de lucro verdaderas, y además sube la barrera de entrada. Entonces, de cada 100, 20 lograrán llegar realmente a una educación de calidad.
¿Educación para todos? A mi hace rato me suena que lo que están pidiendo no es eso, sino que más recursos que los actuales para las pertenecientes al CRUCH, y el resto que se joda por rasca. Eso para mí no es para todos, es al final del día ser más elitista y confinar la educación a los eruditos e intelectuales, y el resto obrero aún con recursos en sus bolsillos, a trabajar de temporero porque no le alcanzó la neurona y las privadas con fines de lucro desaparecieron.
Me parece bastante egoista por decir lo menos el tema. Ayer escuché con atención a Giorgio en Tolerancia Cero, y hoy escuché al rector de la Chile en Radio Duna, y me quedó claro que la intención es "denmos más recursos a nosotros, necesitamos mucho más, y el resto, quia!". Es más, Girogio no supo afrontar la consulta de Matías del Río sobre lo regresiva de su petición; como tampoco pudo responder a Villegas sobre "que los recursos no era lo único que se necesitaba para mejorar".
¿Dónde está el verdadero plan para una mejora en nuestro sistema educativo? ¿Dónde están las protestas por mejores profesores, más libros que leer, nivel de enseñanza más exigente, más pruebas de admisión, actualización de contenidos? Necesitamos más imaginación, más creatividad, más laboratorios, más I+D, más comprensión de lectura, más libertad, más espacios para la discusión, más cultura cívica. Es inversión a largo plazo, pero tenemos que dejar de una vez por todas de funcionar en base a medidas efectitas, de corto plazo, no sustentables, que no son otra cosa que aspirinas para ganar votos.