A ver, aprovechando que es temprano, estoy mas despejado y todavía no me pongo idiota

, voy a tratar de ser algo mas explícito, considerando que el famoso tema del dólar no es de ahora ya que es un factor económico relevante para los exportadores y no ha cambiado desde hace 25 años en los que me dedicaba fundamentalmente a eso en el rubro pesquero. Junto a esto, he recopilado información mas actualizada pinchando Emol y otras informaciones financieras mas que nada para obtener cifras y metiendo todo a mi juguera puedo llegar a este resumen.
Estamos claros que lo que sucede con el cobre y el dólar es relevante para Chile, tanto por ser el mayor productor del metal rojo del mundo, como por el volumen de las exportaciones llevadas a cabo en el último período, producto de los TLC y la aparición de nuevos mercados.
Chile elevó sus exportaciones de cobre un 63% en Marzo frente al mismo mes del año pasado. Los envíos de cobre alcanzaron a US$2.755 millones en comparación a los US$1.690 millones de igual mes del 2005. Con esta cifra, las exportaciones de cobre sumaron 6.065 millones de dólares en el primer trimestre, un 53 % más que en el igual período del año pasado. Por otro lado las exportaciones chilenas en el 2005 registraron un fuerte aumento en términos de valor, registrando una tasa de crecimiento del 30,5%, totalizando envíos por US$39.536,1 millones (según datos Boletín Mensual Enero 2006, Banco Central de Chile).
Ahora, si hablamos de las consecuencias que tiene una caída del precio del dólar, ya sabemos que ha llegado a bordear los 500 pesos en las últimas semanas, lo que ha preocupado al rubro exportador y a la banca. Al respecto el Gobierno ha entregado algunas señales en lo que respecta a la política fiscal y el uso de los excedentes del cobre, sin embargo existen algunos efectos que ya pueden notarse.
Uno de los efectos negativos es lo que ocurre con los exportadores por los menores retornos que están recibiendo, menores a lo esperado y a lo proyectado cuando desarrollaron el proyecto de inversión y este es un punto en el que ustedes no han reparado y es el que siempre ha sido motivo de preocupación y eso lo viví personalmente después de la fatídica desición del tata el año 82, claro en esa oportunidad el dólar se disparó hacia arriba , habiéndonos asegurado que el dólar no se movería por mucho tiempo de los $ 39 y por eso es que la gran masa de exportadores nacionales se endeudó en dólares, por lo que en esa oportunidad el alza mas que productiva fué un desastre ya que no logró compensar a su vez el alza del endeudamiento con la banca y ahí quedó la cagada, pero eso fué un caso puntual de una muy mala jugada del Ministro de Hacienda de aquel entonces. Volviendo a la actualidad, de continuar cayendo el dólar, se pone en riesgo el desarrollo exportador de Chile al perjudicar en particular a la industria exportadora y no al cobre. Por ejemplo, en el caso de los exportadores de fruta , el bajo precio del dólar puede afectar a 100.000 empleos y en particular los temporeros podrían perder la temporada 2010-2011. Otro efecto negativo es lo atractivo que se vuelven las importaciones y el riesgo que eso le significa a los productores nacionales de similares productos. De darse una situación de sustitución de importaciones, la industria local que compite con las importaciones se vería perjudicada y el país pierde un importante sector productivo y generador de empleo.
Es fácil opinar desde fuera cuando no se es exportador. Se dice que deberían estar preparados para situaciones contingentes con una mayor competitividad y varios argumentos más pero no es mucho lo que se puede hacer cuando hoy se pacta un envío de 20 toneladas de palta a US$ 2 el kilo considerando un dólar a $ 600 y mañana el dólar baja a $ 550, es cosa de que saquen las cuentas para observar cuanto pierde un exportador por ese negocio ya que el retorno, en definitiva será a $ 550 y no a $ 600 que fué la cifra original para calcular los costos totales y rentabilidad y contra eso no hay planes de contingencia con la que se pueda estar preparado, las cartas de crédito ya están tiradas , oleadas y sacramentadas y no se puede jugar como lo hacen los distribuidores de combustibles que pueden chantar al máximo los cambios de precios para evitar pérdidas cuando la bencina baja o adelantar el cambio cuando ésta sube.