si es por eso, las empleadas que han trabajado en la casa de mi mamá hasta se sientan a comer en familia los sabados en la mesa. Lo mismo pasaba cuando era chico a la hora del té (que era uno de los pocos espacios donde compartíamos todos) y en muchas otras actividades.
Esta sra no tenia ni un problema con su nana, pero sí con las nanas y obreros sueltos por ahí frente a los niños, lo manifiesta claramente.
en fin, creo que independiente de lo que haya dicho o no haya dicho, la discriminación en ese condominio es horrenda, ojala todo este drama sirva pa que se replanteen y ofrezcan el traslado como un servicio y no como una obligación... no son una subespecie por ser economicamente menos favorecidos, son personas y sus hijos no se van a dañar por verlos pasar caminando por las aceras frente a sus casas.