lo único que queda de manifiesto en estos temas es el doble estándar de los mismos de siempre. No se cansan de exhibirlo. los muertos de mi lado importan, los del otro lado no.
Yo paso frente a la estatua del chicho y queda claro que es un despropósito, un sin sentido porque es rendirle homenaje a un presidente inepto, incapaz de gobernar y de imponerse a la coalición que lo puso en la moneda, rostro del fracaso de un proyecto, de un movimiento y que trajo como saldo que hasta el día de hoy se hable de asesinados y desaparecidos responsabilidad de otros a los que al menos se les ha imputado una responsabilidad. Pero paso por ahí y si bien dan ganas de vomitar al verlo... hay que hacerse el weon porque después de todo es la expresión de una parte de la sociedad y en eso tiene cabida todo este tipo de disparate.