Wajajaja, cometiste un error básico pues, LA SEÑORA NUNCA PUEDE SABER EL PRECIO REAL

Acá algunos consejos pa que no la embarres de nuevo...
Es Lo Que Hay: Si estás pensando casarte o irte a vivir con alguien, la vivienda de soltero debe incluir el equipo más feo y conspicuo posible, clavar la bandera para que se sepa de antes que esto es parte integral del paquete que se está comprando. Después se hace el upgrade a algo estéticamente más discreto y será percibido como una señal de buena voluntad y sumisión.
Sangfroid: Ante cualquier tipo de upgrade, demostrar una cantidad moderada de entusiasmo y asimismo ante la oposición solo un leve malestar pero jamás ira. Aikido o Tauromaquia: Ocupar el momentum del contrincante para vencer, o hacer una ágil Verónica y que pase cagando para el otro lado.
Oportunidades Especiales: El nacimiento de un hijo siempre es un buen momento para el upgrade (Está científicamente comprobado que muchos se compran un auto al nacer el hijo). La atención estará concentrada en la nueva adición a la familia (Por no decir que no te pescarán ni pal hueveo durante un buen tiempo) y el upgrade pasará como algo menor, incluso puede ser justificado como una necesidad freudiana de compensar el rechazo de la nueva madre.
Timing: Realizar el intercambio de equipos en ausencia de la media naranja o bajo el manto de la noche cuando esté durmiendo, lo mismo con los cabroshicos a los cuales se les caerá el casé.
Ojo Con Las Celebraciones: No llenar de amigos al día siguiente para dar a conocer la nueva adquisición, y menos con copete que suelta la lengua. Tampoco hablar por teléfono a todo chancho compartiendo la buena nueva, para eso está el auto.
Vasos Comunicantes: Si entra algo, también tiene que salir algo. Nada de andar llevando tarros o parlantes nuevos si no te has deshecho de los antiguos. Por último guárdalos en una bodega pero que no estén en el mismo recinto al mismo tiempo, de lo contrario se producirá una implosión espacio-temporal.
Camuflaje: En lo posible que el tarro nuevo sea del mismo color que el viejo, lo mismo para los parlantes. O si se cambia, que el nuevo color sea más parecido al resto de la sala, así los ojos del enemigo no repararán en el upgrade al momento del cambio, y cuando lo hagan será visto como un aporte al hogar.
Preparación Del Terreno: Mostrar una foto de los parlantes que se van a introducir antes de traerlos en señal de infinita deferencia. De preferencia algo que los haga ver más chicos, o en su defecto que no muestre la real escala de estos. Es posible que esto genere curiosidad por conocer el upgrade en persona, pero lo más probable es que no, porque en el fondo no le interesa. Si lo quiere conocer en persona es porque algo le interesa, lo cual hace menos riesgoso el proceso.
Internet: El peor enemigo de los que le quitan un 0 a los precios. Cortar los cables, arrancar la caja, destruir el router, tirar el smartphone al water. Después de una semana se le pasarán las ganas de investigar dado que el audio en el fondo no le puede importar menos.
Siempre Con La “Verdad” Por Delante: La mentira siempre será descubierta, no así la omisión parcial de información que además puede ser defendida arguyendo distracción u olvido. Tirar un par de datos duros verificables dejará la credibilidad incólume y saciará la sed de información de la contraparte.
Si Todo Falla, Compensación: El regalo de cosas (a los ojos de uno) inútiles con un valor comercial superior al declarado (jamás el real) para el upgrade hará que la contraparte sienta que al final del día salió ganando, e incluso en un caso extremo puede hacer que espere con ansias el próximo upgrade con miras a recibir un merecido nuevo premio.