Cabros, ¿dónde viven ustedes?
Porque yo al menos acabo de llegar a mi casa, en calle Catedral, porque no se puede mover a ningún lado. Porque hay barricadas en todas las esquinas, pacos por miles, mucha lagrimógena... y sobretodo mucha gente en la calle a esta hora, todos con cacerolas, señoras, abuelas, cabros chicos, tipos con ropa de oficina, estudiantes, jóvenes, de todo. No se si estaré muy loco, pero de verdad no me calza en absoluto sus discusiones sobre los partidos políticos, el PC y demases. Cierto, quieren sacar ganancias del movimiento... pero a quién le importa el PC. Esto es de verdad y esta vez va en serio, en mi perra vida había visto algo de estas proporciones... me emociona pero a la vez me asusta, me da miedo que maten gente, pero no se para donde va esto.
Acabo de entrar a mi casa con cacerola en mano, a pesar de que tengo que levantarme a las 6 para volver a trabajar mañana. Pero les digo, esto es diferente a cualquier otro movimiento vivido en "democracia".
Por otra parte, y el motivo del miedo, se perdió todo límite. Bajar estudiantes de las micros en comunas aledañas para que no lleguen al centro y no dejar entrar jóvenes al metro Vicente Valdes (es decir, no permitir el derecho a libre tránsito), un baleado en Concepción, limitación del derecho a reunión en casi cualquier parte del centro de Santiago. Eso me da miedo, porque la política del Ministerio del Interior está siendo digna de la Dictadura Militar. ¿Qué queda ahora?, ¿Muertos?.
Esto es una extraña sensación entre cansancio del abuso de un sistema desigual, mucha emoción por la efervecencia y un profundo miedo a volver a vivir en el miedo. A pesar de ser jóven aun, creo que me quedé en el pasado, estos jóvenes no tienen miedo, han perdido la herencia maldita que cargamos muchos, directa o indirectamente. Esto no va a parar.
Bueno, mi reporte desde mi vivencia en este lugar.