Tema difícil porque básicamente las personas naturales no pesamos en la decisión sino que pesa "la economía". Profundamente injusto es que las grandes empresas como mineras tengan cero impuesto por el tema de los caminos públicos (es la excusa) o la devolución al transporte, pero si se llega a hablar de la eliminación de éste viene la campaña del terror del crecimiento, de que subirán, aún más, los precios y todo ese discurso donde sólo ganan los mismos de siempre.
Buscar credibilidad o hacer respetar el principio de que ya no se cumple para el fin que fueron creados es una batalla pérdida hace años, simplemente la consecuencia del origen con el uso hoy no le importa a nadie de los que legislan o toman decisiones. Recauda muchas lucas para fines generales que ya son considerados como "inamovibles" en el presupuesto; el fin justifica los medios.
Yo feliz pagaría más impuesto en el diesel, igualándolo a la bencina por ejemplo, si es que esa plata fuera a financiar la ampliación de un ferrocarril que una Chile al menos de La Serena a Puerto Montt, tanto para pasajeros como para carga. No tiene ninguna lógica racional que en un país con esta geografía no tengamos tren. Pero claro, arruinas el negocio del transporte terrestre privado, el cual hoy tiene muy pocas barreras de entrada, por lo mismo está plagado de empresas de transporte que contaminan y congestionan día a día. Les encanta el libre mercado pero asegurado de no competencia por parte del Estado.
Tema precio, bajando $200 el litro de combustible dudo que se traspase a precios de consumidores, eso es una utopía.