Así es, en dos horas más cargamos el bólido y emprendo viaje a mi querido Ancud, Chiloé, a descansar después de un año groseramente inestable y complejo.
A pesar que me vino el síndrome pipe

(al sonata le empezó a sonar una bandeja el día lunes y se le murió la caja reguladora del alternador anoche

), el auto está impecable para este viaje, como los dos veranos anteriores así que les comentaré los pormenores de la ruta y obviamente fotos de donde andemos por ahí
Nos vemos el 17, salvo que me meta a un ciber en los proximos días para sacarles pica

un abrazo