Lo otro es que los que dan el ejemplo de MEO se disparan a los pies, pues si bien muy ejemplar, romántico y quijostesco lo que hizo MEO y, por cierto, inspirador, pero con un sistema electoral proporcional MEO habría tenido además, lista parlamentaria, y su 20% en las presidenciales, hubiese tenido un correlato en elección de diputados y senadores.
No obstante ello, el sistema binominal se lo impidió.
Así que los que sacan el ejemplo de MEO, precisamente ello es una razón más para cambiar el sistema electoral por uno representativo y no el que genera mayorías forzadas y artificiales que tienen a la política chilena convertida en la caricatura que es hoy en día.