bachelet mostró los inquietantes ribetes a qué está llegando la política en nuestro país..., al mostrar la dudosa calidad de contenidos que ella expresó cuando hizo uso de la palabra.
Si un telespectador ajeno la realidad nacional cotidiana tuviera que describir el país por el que la bachelet compite por presidir, tendría que concluir que se trata de uno en el que virtualmente todo funciona mal..., en que los abusos y transgresiones a la convivencia civilizada entre los ciudadano es la norma, en que las privaciones a que está sometida la población son gigantescas y, por lo tanto y en definitiva, lo que correspondería es modificar todo el sistema institucional bajo el cual el país funciona.
Pareciera que bachelet, para poder establecer contacto con la población, tiene que competir en el grado de crítica antisistema de sus dichos, pero - y esto es aún más inquietante - sin que ofreciera, como contrapartida a sus objeciones y rechazos, propuestas coherentes y comprensivas, que plantean soluciones a lo anterior más allá de promesas facilitistas, que involucran gran cantidad de recursos sin sustentar su fuente.
Y para agregar más inquietud a lo anterior, la ciudadanía tiene un importante grado de inmadurez, que le permite aceptar, sin mayor debate ni desafío, argumentaciones de michelle bachelet basados en críticas generalizadas y soluciones básicamente irreales, olvidándose por completo que ellal ya nos gobernó.