Claramente es una ironía lo que plantea.
Y fuera de la ironía, hay actitudes de simio al volante que aún me cuesta entender, como los weas que andan pelando forros en estacionamientos de centros comerciales/supermercados, o que andan dentro como si estuvieran en una autopista; los que le tiran el auto encima a los peatones en las esquinas o que tapan a bocinazos al que está delante porque deja pasar a un peatón, los que tocan la bocina por todo, los que en un taco en la carretera se tiran a adelantar por la berma, etc, etc.