
Ahorra combustible de un 10 a 15%.
Estabiliza el voltaje en todos los componentes eléctricos del vehículo.
Aumenta RPM y torque de motor, por lo que éste es más potente y tiene una respuesta más rápida del acelerador.
Los autos automáticos experimentarán un cambio suave en el engranaje.
Todo esto asegura un menor consumo de combustible.
Amigable con el ambiente.
No es necesario añadir sustancias químicas al estanque, por lo tanto las emisiones de escape son más limpias.
Inofensivo para el motor.
Aumenta la vida útil del vehículo y es seguro de utilizar.
