Si no hay tapa de lluvia, algunas gotas entrarán por la boca del tubo. Durante la marcha estas gotas serán vaporizadas y expulsadas por los gases calientes. No obstante, en el peor caso, que sería tubo vertical sin tapa (los hay) y vehículo estacionado largo tiempo bajo la lluvia, podría producirse una acumulación de agua en el silenciador. Para esto, suele disponerse un pequeño agujero de drenaje en su parte baja.