Nadie discute que los accidentes pueden ocurrir, pero lo observado, es que los automovilistas cuando ven perros a los lados de la carretera pasan rajados y sin ponerles atención, por eso webean después por los daño materiales más que por la vida.
Obvio que si puedo hacer algo sin comprometer mi seguridad y la del prójimo lo hago, pero si no puedo hacer nada, debo optar por el mal menor, que muchas veces se reduce a impactar al animal, si no pasan situaciones como el choque en que estuvo involucrado el tío de Kbzon, que son mucho más graves.
En Peñalolén es cuático el tema, hay mucho perro circulando libremente por las calles. En el C3 atropellé varios

(a poca velocidad, por suerte). En el Yaris dos, el último me hizo mierda el parachoques al salir de sopetón de noche del bandejón central de Grecia hacia mi pista, no alcancé siquiera a bajar la velocidad (y no iba rápido para nada)
