Creo que se ha generado un punto de despeje de controversias interesante respecto a los aditivos.
En general, no son recomendados por los fabricantes de autos dado la imposibilidad de probar y certificar todo lo que anda dando vueltas así como los casos de productos muy conocidos y que resultaron ser un "bluff". No obstante, el asunto no debe ser generalizado y debiese tratarse caso a caso ya que existen aditivos que son beneficiosos para mantener o mejorar el rendimiento de los vehiculos o que permiten resolver problemas puntuales.
Creo que hay otro aspecto: la compatibilidad. Hablando sobre aditivos en general, existe la posibilidad de que aunque un aditivo no pueda ser considerado "malo" en si mismo, tenga problemas de compatibilidad, ya sea con el fluido al cual se agrega o con el sistema en el cual trabaja.
Por ejemplo, en el caso de aditivos para el combustible, muchos de estos aditivos diseñados para remover depósitos, o barnices o gomosidades pueden contener solventes o ingredientes similares que pueden ser dañinos para el sistema de combustible y el motor (no lo digo yo, lo dice Nissan).
En el caso de los aceites de transmisión, un aditivo EP que facilite el deslizamiento de las partes, podría hacer que los sincronizadores (que funcionan en base a rozamiento), trabajen mal y se dañen prematuramente. En el caso de los refrigerantes, los de tonalidades verdes poseen aditivos incompatibles con los de tonalidades rojas. Es mas, hay autos que traen originalmente refrigerante verde y recomiendan enfáticamente no usar el anaranjado (aunque estos en general se consideran superiores) ya que podría dañar el sistema, ahora ¿el aditivo que venden es compatible en mi sistema?.
En el caso específico de los aceites de motor, el aditivo podría mejorar alguna propiedad del aceite, pero también podría perjudicar otra, romper el equilibrio y producir finalmente un efecto global negativo. Es muy difícil estimar a priori si el efecto global es realmente beneficioso, especialmente para un usuario común sin los conocimientos ni medios para determinar los efectos. Por otra parte, los aditivos de diferentes marcas o tipos de aceites no son necesariamente los mismos. Por ejemplo, si se ha de mezclar aceites, cosa que en general no se recomienda (pero a veces no queda otra), se trata de mantener al menos el tipo de aceite (mineral, sintético) y la clasificación API, ya que sus aditivos serían presumiblemente mas compatibles, aunque hayan diferencias de viscosidad. Entonces, ¿tiene este aditivo compatibilidad con mi aceite?. Posiblemente si uso un aceite Liqui Moly, el aditivo Liqui Moly sea totalmente compatible y los efectos sean buenos, sin embargo ¿sería igual si agrego ese aditivo a un aceite Shell?.
Como puede verse, el tema es muy complejo, hay mucho afán comercial en la venta de estos caros productos y el buen resultado técnico no está asegurado, es mas, podría ser muy negativo. Entonces, a pesar que algún aditivo podría ser realmente adecuado en determinado caso, dado que un usuario común no tiene los medios para saber el real efecto en su caso particular, le recomendación general es la conservadora: en la duda, abstenerse.