Bueno, logré ver el programa completo ayer, y me queda relativamente claro que la señora exagera y ataca en demasía a sus detractores, lo que quita validez al mensaje que quiere transmitir, que me parece muy bueno y con mucho valor, y tengo claro que lo hace así porque tiene el efecto de levantar a las masas en pos de su causa.
Entre las cosas que me quedaron en la retina, fue la entrada de la señora, hablando del sueldo que le pagaban a Daniel Fernández para defender al proyecto, lo que me pareció soso y mala clase. A nadie le deberia importar qué sueldo gana, así como tampoco sabemos cuánto le pagan a la señora Larraín para poder oponerse al proyecto. Recordemos que esto también tiene un coste.
Otra cosa, es que está más que prostituída la palabra "*_polio". Cualquiera habla de monopolios, oligopolios, duopolios, y no se hace responsable del mal uso del concepto. Como Daniel dijo, si efectivamente existe un delito en cómo se distribuye la industria en Chile, el Tribunal de Libre Competencia debería recibir los antecedentes de parte de los acusadores, y presentar las querellas correspondientes. ¿Por qué no se ha hecho entonces?
El punto más importante fue el de la "destrucción" de la Patagonia, donde la señora Larraín tuvo que finalmente reconocer que 0,5% no es toda la patagonia, y que el problema es "se va a inundar el 70 por ciento de los valles significativos de la provincia de Capitán Prat”. Entonces, ¿por qué no se sincera la propaganda de los detractores? Hablemos las cosas como son: el problema no es la Patagonia, es el 70% de ciertos valles de la provincia Capitán Prat. Mentiras por ambos lados, como vemos. El fin justifica los medios dirán otros, para mí invalida la postura alguien que tiene que mentir o exagerar para buscar apoyo popular.
Tampoco se hizo cargo la señora Larraín de la "carbonización" de Chile. Están todos en contra de HA, pero a nadie le interesa un punto el tema de tanta central a carbón que se ha construído en los últimos años. Entonces, donde está el verdadero sentido ecológico del tema, o sólo es ir en contra de los grandes grupos económicos porque está de moda.
El problema para mi gusto, que este tipo de mentiras polariza el tema, subleva a la gente, y se protesta sin tener todos los antecedentes concretos. Un punto no menor es que construir HidrioAysén, no invalida en ningún momento presentar otro tipo de proyectos con energías renovables y menos invasivas. ¿Por qué no se están presentando estos proyectos? ¿Dónde están, y sus respectivas líneas de presupuesto, si existen? ¿Por qué las ONG que tanto quieren "no_hacer", proponen un "que_hacer"? Entiendo que Chile es libre mercado, no hay restricciones a presentar proyectos alternativos y viables, como parte de un proyecto de inversión privado.
Algo que sí me gustó de la señora Larraín, fue el indicar que no se ha incorporado la eficiencia energética dentro de la ecuación que calcula el consumo a futuro. Creo que la gente estará más que gustosa de bajar su consumo mensual, si con esto conseguimos bajar la cantidad de proyectos eléctricos para Chile. Ahí hay una falencia enorme del Gobierno: debe involucrar esta variable, y existir incentivos y multas asociadas.
También me interesó ver las cifras de desacople entre el PIB y el aumento de energía, lo de Chile versus lo de países desarrollados del ODCE. La diferencia es brutal, y recién ahora estamos empezando a desacoplarnos, por lo que ya no es sustentable indicar que en 10 años tendremos que duplicar sí o sí la matriz. En otras palabras, no requiere la urgencia que se le dio al proyecto en un principio, y se podría analizar con más tiempo todo su impacto en general.
Se dieron con todo pero fue bueno el debate, sobre todo cuando la señora Larraín pasó de atacar nimiedades y a concentrarse en datos técnicos duros.