CITY insiste en que pagamos una tasa sobre el PIB que es menor que la OCDE e insiste majaderamente que hay que seguir sobrecargando a quienes producen.
La verdad es que esta 'baja tasa' la estamos pagando casi en su totalidad los emprendedores y los capitales invertidos en empresas. No las personas comunes y corrientes.
Tenemos tasas escandalosas a todo evento sobre las empresas y las personas. Ya lo mencioné anteriormente. Tengo una PYME y estoy trabajando para pagar impuestos el equivalente a 4 meses productivos del año sin recibir a cambio absolutamente nada del estado de Chile. No recibimos salud, ni educación ni seguridad, ni pensiones. Todos esos item los pagamos aparte.
Sinceramente los emprendedores somos tratados como ciudadanos de tercera clase en este país, donde la izquierda insiste cada vez que puede en meternos más las manos al bolsillo. Con la excusa de la 'desigualdad'.
Como si mantener al estado con lo que producimos no fuese suficiente, ahora quieren despojar el patrimonio legalmente ganado y que ya tributó?
Por favor, háganse ver si juran de guata que vamos a seguir en Chile en este escenario hostil.
Estimado Bozon. por favor quitese las anteojeras ideologicas y deje de pensar que su realidad personal es la realidad del país.
Entiendo que le duela paga impuesto a la renta. En mi familia tenemos una empresa que en los ultimso años ha escalado de microempresa a pequeña empresa, y para evitar que no suceda lo que le pasó a Ud. con los impuestos a la renta este año, nosotro cada año subimos nuestro PPM para ajustarnos al aumento de impuesto a la renta que nos va tocando cada año. Asi que lo entiendo.
Pero ud. se equivoca de medio a medio y se victimiza innecesariamente. La realidad es justo al contrario de ud. dice:
En chile, los ingresos tributarios recaen mayormente sobre las personas comunes y corrientes, y no sobre los empresarios. Las tasas en chile son altas, en especial sobre las empresas, pero la recaudación efectiva del impuesto a la renta, en especial de las peronas, es baja. Eso se debe al sistema tributario integrado o semi-integrado, y porque hay varias formas de ganancia de capital que estan excentas.
En 2018, la carga tributaría en el país se destribuyó de la siguiente manera:
IVA: 40.8%
Otros impuestos a bienes y servicios: 13.3%
Impuesto a las personas: 9.8%
Impuestos corporativos: 21%
Otros: 8.1%
Contribucaiones sociales: 6.9%
https://www.bcn.cl/obtienearchivo?id=repositorio/10221/26064/1/Carga_tributaria_chile_comparativo_FINAL.pdfEn sintesis, los empresarios aportan con poco más del 30% de la carga tributaria, impuestos bienes y servicios son el 53% de la carga tributaria.
En % del PIB, estan los datos de la OCDE del 2018:
Impuestos a bienes y servicios: 11.5% del PIB
Impuests a las ganacias personales y de empresas: 7.5% del PIB
Contribuciones sociales: 1.5% del PIB
Impuestos a la probiedad: 1.1% del PIB
Por eso la estructura tributaria chilena es considerada regresiva y no ayuda a reducir la desigualdad.
Y por eso mismo es que un sistema integrado con baja tasa de impuesto a las empresas es interesante: porque le baja la carga tributaria a las empresas, que en chile es alta y se la sube a las personas dueñas de las mismas, lo que tiene el doble efecto de favorecer la inversión en las empresas y aumentar la carga tributaria sobre los más ricos.
Por otra parte, se le olvidó leer que creo ( y quienes proponen lo que yo digo también) que es importante pensar en un espacio para un régimen tributario más amigable para las pymes, ya que el aumento de impuesto a la renta a las personas puede golpear muy fuerte a los dueños de las pymes y eso hay que considerarlo. Y también que es importante gravar otras formas de ganacias de capital de las peronas que vayan más allá de las utilidades que reciben de sus empresas, porque ese es un espacio vacío de nuestro sistema impositivo. Y agregando esa contribución, bien podría limitarse un poco la subida de los impuestos personales
Sobre la queja de que el estado no da servicios para los contribuyentes. Es un argumento tramposo y contradictoria. Cuando se esta pidiendo aumentar la carga tributaria, no es para castigar a los ricos o a los empresarios. Es justamente para crear el estado bienestar que no tenemos y dar los servicios que ud se queja no tiene. Y por demás, usted nunca ha estado de acuerdo con un estado bienestar, por lo que me parece una frescura que diga eso.
El sistema irlandés es interesante por cuanto no golpea a la inversión, más bien la estimula.
Pero antes que eso hay que achicar el estado. Y no por motivos ideológicos solamente (ya antes me he declarado entre anarquista y minarquista), sino por motivos de eficiencia. Reduciría regiones, eliminaría las gobernaciones y algunos ministerios. No veo sentido en tener una ENAP que vive perdiendo plata para darle pega a los camaradas y compañeros. Lo mismo con correos de Chile. EFE y METRO aunque son caras cumplen un rol social importante, pero TVN no se justifica.
Además, nos estamos acostumbrando a los bonos. Tanto que ya parecen un 'derecho'. Los bonos son peligrosos no sólo para la salud del erario sino sobre todo porque crean una ciudadanía-cliente de políticos.
Concuerdo en que hay que ponerle énfasis a la eficiencia del estado. No me siento suficientemente ifnormado como para decir si es buena idea eliminar las intendencias, pero suena muy interesante. Sobre ENAP, diria que es demasiado estratégica para deshacerse de ella, hace bien su pega de refinamiento ( mal que mal, tenemos combustible de estandar de primer mundo) y es una empresa que no siempre es una carga para el estado, tampién ha dado utilidades. De Correos, no te sabría decir. Por una parte, creo que es otro servicio estrategico y que en un mundo que transita hacaia el e-commerce, una red postal altamente capilar es fundamental para que las localidades aisladas puedan sumarse cmo compradores u oferentes, pero no se si hoy en día correos esta ofreciendo ese servicio capilar que ofrecia en los años dorados de las cartas.
Sobre los costos de la política, reducir los gastos del congreso a la mitad podría darnos unos 80 millones de dólares, lo que no esta nada de mal, pero es poco al lado de lo que estamos conversando. El costo total del ministerio del interior ( que incluye por lo mismo los gastos de los gobiernos regionales y las gobernaciones) en lo que es personal y costos de mantenimiento asciende a unos 200 millones de dólares. Por lo mismo, reducir regiones y quitar gobernaciones no es que de un ahorro impresionante tampoco.
En cuaquier caso, el aumento de la eficiencia y reducción de costos no es una panacea. Un estudio del BID cifraba el costo de corrupción y despilfarros estatales de diverso tipo en Chile en 1.8% del PIB.. unos 5000-6000 millones de dólares.
https://publications.iadb.org/publications/spanish/document/Mejor-gasto-para-mejores-vidas-C%C3%B3mo-Am%C3%A9rica-Latina-y-el-Caribe-puede-hacer-m%C3%A1s-con-menos.pdfComo es irrazonable pensar que se puede acabar con toda corrupción e ineficiciencia, creo que un sólido plan de eficiencia estatal podría darnos 3000 millones de dólares extras a considerar, lo que no esta nada de mal. Pero es sólo el 20% de lo que planteo.
De los bonos, totalmente de acuerdo. Mala política pública, aunque en contextos de crisis como esto son un mal necesario. Pero no pueden volverse permanentes, como es la tendencia.
Me gustaría terminar con un planteamiento simplemente prágmático y realista sobre el tema. Dejemos de lado la discusión si Chile deberia tener un estado bienestar, la discusión sobre la desigualdad, sobre la eficiencia del estado, de cuanto y cómo se tributa. Hagamos un mero ejercicio de proyección, siguiendo un razonamiento economicista básico.
Todos uds anti-impuestos han remarcado en todos los tonos que el estado no puede aumentar su gasto de manera irresponsable porque eso genera espirales de endeudamiento, que afectan la imagen país, gravan a las generaciones futuras con intereses, aumentan el riesgo, disminuyen la inversión, generan inflación. Un país con ahorros y un estado que gasta lo que tiene y no más es un país responsable y deseable. No queremos ser argentina dicen. Y es razonable
Estamos antes una crisis social, política y económica de proporciones, probablemente de las peores de nuestra historia, aunque podría ser breve en su impacto económico ( ojalá..). La única manera de evitar un colapso mayor de la economía y la sociedad, y por tanto de salvarnos todos, es un con un plan de rescate sólido. El estado debe apoyar a ciudadanos y empresas.
El estado Chileno por lo mismo, esta haciendo enormes esfuerzos de eficiencia ( el gobierno ha sido bastante draconiano con los recortes, basta ver todas las protestas de los funcionarios públicos en los últimos dos años). El estado ya ha aumentado su gasto en 2000 millones de dólares y ha reajustado presupuestos (hay mucho gasto que no podrá ejecutarse con la pandemis en el medio) y retrasado impuestos por algo así como 8000 millones de dólares. Un nuevo plan de 12000-15000 millones de dólares está en camino, segun se ve.
La recaudación del próximo año bajará enormemente, por la crisis económica que se viene.
Asi que el estado tandrá que usar los ahorros que hay, y probablemente la deuda pública llegue al 40% del PIB en los próximos años. Ese es un nivel todavía bastante razonable para estándares mundiales, pero muy alto para nuestro estándar. El pago de la deuda comenzará a abultarse. Menos mal que podemos consegir tasas de interés bajas hoy en día. Ya la clasificacion de riesgo ha bajado y hay que moverse para que no lo haga.
Tenemos una enorme presión de gasto público, no sólo por el gasto que hay que hacer para amortiguar la crisis, sino porque el ambiente político post estallido no está para austeridades y recortes y los políticos se irán con much cuidado. Al contrario, hay demanda de mayor gasto social. Y como la legitimidad política es tan baja, Chile no está para un líder que nos pida sangra sudor y lágrimas para salir adelante. En suma, es irrazonable pensar que el hoyo que dejará esta crisis lo podremos tapar sólo con eficiencia y recortes. Algo habrá que hacer en ese frente, per no da para mucho y ser radicales en esto es políticamente inviable.
En suma, independiente de lo que pensemos sobre los impuestos, es práticamente inevitable que en el mediano plazo suban los impuestos. Y no sólo porque es muy probable que el futuro gobierno tendrá que aumentar el gasto social corriente por el contexto post-crisis económica y post-estallido social, sino porque será necesario para recuperar la confianza de los inversores en Chile, evitar que la deauda pública siga subiendo, crear nuevos ahorros para las futuras crisis que enfrentaremos, mantener los servicios sociales que hay y sostener la escasa legitimidad política de nuestro sistema.
En suma: si queremos que Chile siga siendo el pais ordenado en sus cuentas que es, no hay muchas alternativos sino subir los impuestos.
Cuanto suban es dificil saberlo, al final dependerá de la capacidad de la política de limitar las presiones de gasto social y de que agujero fiscal dejará efectivamente la crisis. Esperemos que los vaticinios que dicen que la crisis será fuerte, pero corta sean ciertos.