Tiempo atrás vi la película "la ola" que me parece que es el tema comentado: cómo el peer presure y tener un objetivo (cualquiera sea) hace que la gente haga estupideces.
También me acuerdo en mis tiempos de colegio una vez que un grupo quiso cambiar la fecha de la prueba que tocaba ese mismo día (esto fue en 3 o 4 medio). El profesor por lo visto quería aceptar, así que dijo que la cambiaba si nadie del curso (unos 60) se oponía. Yo fui el único que se opuso. Después, se me acercaron varios, unos 6 ó 7, que confesaron que también querían oponerse. Les dije que eran maricones.
Claro, tiene mucho que ver. Esa película está basada en un libro que a su vez resume la experiencia llamada la "Tercera ola", hecha por un colega profe de historia llamado Ron Jones.
El tema es fascinante. Más si consideramos otros antecedentes muy relacionados:
El experimento ASCH que demostró el concepto de la "conformidad" y que explica tu experiencia con la prueba. No más de un 25% de la gente es capaz de desafiar al grupo incluso sabiendo que los demás están equivocados. La mayoría sigue y hace lo que los demás para no quedar expuestos (tus compañeros maricones).
El experimento de ROBBER'S CAVE: Demostró la facilidad con que se puede generar hostilidad entre los grupos de personas. La novela-película EL señor de las Moscas tiene que ver con él. El concepto detrás es la "hostile troop behavior" que nos deja muy cerca de primates como los chimpancés. Lo único bueno descubierto por esa experiencia es la "meta super ordenada", vale decir, la capacidad de las personas para unirse cuando algo externo los desafía. Es el concepto common enemy effect y comprende desde una gran catástrofe (de eso sabemos en Chile), hasta una guerra o quizá algún día, una invasión alien.
Pero quizá el peor descubrimiento es el del experimento MILGRAM (Yale, 1963). No voy a detallar como es (aunque hay una película en Netflix que se llama igual, la vi hace tiempo espero que aún esté), pero demuestra la maldad en la que pueden caer las personas con tal de no desafiar a otros y menos a sus superiores o lideres. Ese experimento fue el que vino a constinuación del concepto "banalidad del mal" que acuñó Harendt y tuvo su corolario en el experimento de la cárcel de Stanford y del cual también se hizo una película (que al igual que la ola, es alemana).
Al final, Parra tenía razón, los humanos somos una mezcla de ángel y bestia.