El fútbol es una mafia, lo vimos acá en el campeonato local con todo el tema de las elecciones de la ANFP, lo hemos visto en la conmebol cuando salen los sorteos de Libertadores en beneficio de Boca, o la selección de árbitros cabrones para los partidos de las selecciones de la media con Argentina o Brasil... incluso de las eliminatorias desde el 98, en que Argentina jugaba de local con Chile la primera fecha, como para decirle a los gauchos que partieran con el pie derecho dándonos un baile, y terminan las eliminatorias en Uruguay como para echarse una manito entre ambos por si las cosas salen mal.
Lo bonito del futbol es ir a ver a los equipos chicos, esos que pelean entre sí para que no se los caguen a fin de año los equipos grandes... lo que vemos ahora con O'higgins y la católica no es casualidad tampoco... pueden decir que Cuma Cuma o las madres tienen mucho más hinchada... sin embargo el capo movió toda una región (lo que se vio claramente en el fiscal de Talca ayer), y la católica tuvo buenos aforos en Sn Carlos todos los partidos no importando si jugaba el clásico o contra tricolor de Paine, si perdía o ganaba (a diferencia de los otros grandes que si andan mal, como cuma cuma, con suerte llevan 4 mil personas).