Conduce Chile

Por Rafael Mies

Un millón ochocientos mil pesos representa la línea de corte por sobre la cual está el decil más rico de la población chilena. En otras palabras, si los ingresos de una persona están por encima de esta cifra debe considerarse oficialmente rica.

Ser rico no solo significa estar privado o marginado de la mayor parte de los beneficios sociales, significa además tenerla responsabilidad de financiar al resto más vulnerable. Esta definición de riqueza no solo tiene una falla esencial en su cálculo, que cualquier contador no demoraría un minuto en entender, sino también en sus implicancias para nuestras políticas sociales y las posibilidades de seguir creciendo.

Es sabido que la riqueza poco tiene que ver con los activos o con el monto bruto de los ingresos si estos no se comparan con los pasivos o con los “gastos de la operación”. No estoy hablando de “gastos no operacionales”, sino de aquellos directamente relacionados con la posibilidad de generar este nivel de ingresos. La verdad es que detrás de muchos de estos supuestos ricos existe una realidad escondida, mes a mes, de incapacidad de solventar sus gastos corrientes. Y no me estoy refiriendo a vacaciones o placeres hedonistas sino a bienes básicos como movilización, alimentación, salud, vivienda y vestuario.

Es bueno entender que la sensación de pobreza y desamparo tiene mucho más que ver con la imposibilidad de solventar un nivel de vida que con los ingresos generados a final de mes. De ello se deriva la paradoja de que alguien, ganando cuatrocientos mil pesos, pero con cobertura de salud, educación, alimentación para los hijos y acceso a un sinfín de políticas sociales, pueda tener a fin de mes una sensación de “riqueza” mucho mayor al que gana sobre las noventa unidades de fomento. El riesgo de esta situación es que la política social termine desincentivando a la clase más vulnerable a generar de un modo formal mayores ingresos.

Dejar de ser pobre y pasar a la clase media puede significar para muchos entrar literalmente al “valle de la muerte” donde se acaban los beneficios y subsidios públicos y comienzan las deudas.

Sin darnos cuenta hemos entrado en un juego dialéctico por el cual aumentar los ingresos significa pasar “al bando de los malos”. De cierto modo a partir de un millón ochocientos mil pesos la persona debiera casi sentir culpa de su situación privilegiada y, por lo mismo, no esperar del Estado más que una férrea fiscalización tributaria.

El ataque constante y transversal del discurso político a las personas y empresas que van alcanzando cierto nivel de ingresos está hipotecando lenta pero efectivamente el crecimiento y desarrollo del país.

Una sociedad sana promueve, empuja y aplaude el desarrollo económico de sus ciudadanos y organizaciones y desde ahí se encarga de asistir a los más débiles. Curiosamente, y con todos los defectos que tienen, esto es lo mejor que han entendido los chinos.

Permítanme concluir recordando las palabras de un profesor que me marcaron profundamente: “no puede haber amor al prójimo si primero no hay autoestima y amor a uno mismo” y eso, no se construye con un asistencialismo que por tratar de ayudar anula en las personas el deseo de ser más.

Fuente DF.cl http://w2.df.cl/un-millon-ochocientos-mil-pesos/prontus_df/2013-10-23/213408.html

Me pregunto si ese camino que lamentablemente los chilenos estamos eligiendo seguir, nos está llevando a quedarnos pegados en un pais de clase media y no dar el salto final al desarrollo. 

BUELA HALTO PARISI
Sacaste lo que mas te conbenia de la columna para teergiversar tipico de ti

Jajajaja, le falto que con 400 lucas ademas de cobertura de salud, educación, alimentación para los hijos y acceso a un sinfín de políticas sociales, te alcanza pa un mazda, bici, vacaciones, ir al super, comer afuera los fines de semana etc..

jajajaja que sensacion de riqueza se siente con 400 lucas en el bolsillo 

BUELA HALTO PARISI

pero wn la opinion del columnista esta en todo el texto, que tiene que tome la parte mas absurda de su opinion???

ese qlo que escribe no cacha na de la bida po wn 

segun el con 4 gambas mantenis a tu familia, tenis salud, educacion, comida... casa...etc... jajaja, el qlo iluso

No entendiste nada de lo que dijo el tipo, y te falta mucha calle, porque hay gente que gana eso y mantiene a su familia.

Típico de un Parisi-lover. 

ya, cargale la bip y le hjaces un queque tambien al Dinafacho ahora 

Anda a buscar candidato nuevo será mejor. 

Es no mide nada, los únicos temas on fayer en este foro son de troleo, por eso te sientes como en casa. 

Es no mide nada, los únicos temas on fayer en este foro son de troleo, por eso te sientes como en casa. 

que te pasa

Cacike le da nibel a este foro

Así con el articulo de prensa 

Si claro, lo entendiste tanto, que por eso no opinas

20 años sembrando que para vivir bien no hay que trabajar, sino subir la tasa de impuesto a las empresas... alguien esperaba cosechar otra cosa?   

Son complementarias pues.
Por un lado en Chile es cada vez más fuerte el sentimiento de que a la gente le "deben" algo. Aquí vienen a servirse de sus derechos, y los deberes, bien gracias. Gente floja de mente que piensa que el camino es cambiar las leyes para hacer todo fácil, gratuito y sencillo, y el trabajo sólo "enriquece al empresariado".

Hay que trabajar. Ya sea para una empresa, ya sea porque tienes un terreno y al vivir de él, debes preocuparte de la siembra, la cosecha, el forraje para los animales, etc.

Pero también se requiere una carga de impuestos que permita al aparato del Estado funcionar. Dime qué país vive sin impuestos.
Y para nivelar las asimetrías y las ineficiencias que se producen en la vida diaria, esos impuestos deben ser utilizados en proyectos sociales, entre otras muchas cosas. Y a más gente, el costo sube.

Otra cosa sea que se mal gasten esos impuestos. Ese es otro debate.

Pero se necesita trabajar y pagar tus impuestos para que funcione esto.
Y cuando digo funcionar, me refiero al país; no que cada quien busque la propia conveniencia.

desde luego, yo nunca he dicho que se supriman los impuestos, digo que no tiene sentido subirlos en un país que desperdicia tanta plata, cuando bastaría con controlar más la elusión y reestructurar el gasto.

Mientras tanto en Luxemburgo el impuesto a la inversión financiera extranjera es de un 0% y tienen 13 mil empleos en esa industria... acá le tenemos una popular tasa del 35% y adivina que? no invierte nadie, incluso las corredoras chilenas tienen que colocar las inversiones afuera, en Luxemburgo, capitales americanos que invierten en Brasil, a través de Chile van a darle pega a los luxemburgueses

Afortunadamente esta lista para votarse la modificación

Son complementarias pues.
Por un lado en Chile es cada vez más fuerte el sentimiento de que a la gente le "deben" algo. Aquí vienen a servirse de sus derechos, y los deberes, bien gracias. Gente floja de mente que piensa que el camino es cambiar las leyes para hacer todo fácil, gratuito y sencillo, y el trabajo sólo "enriquece al empresariado".

Hay que trabajar. Ya sea para una empresa, ya sea porque tienes un terreno y al vivir de él, debes preocuparte de la siembra, la cosecha, el forraje para los animales, etc.

Pero también se requiere una carga de impuestos que permita al aparato del Estado funcionar. Dime qué país vive sin impuestos.
Y para nivelar las asimetrías y las ineficiencias que se producen en la vida diaria, esos impuestos deben ser utilizados en proyectos sociales, entre otras muchas cosas. Y a más gente, el costo sube.

Otra cosa sea que se mal gasten esos impuestos. Ese es otro debate.

Pero se necesita trabajar y pagar tus impuestos para que funcione esto.
Y cuando digo funcionar, me refiero al país; no que cada quien busque la propia conveniencia.