hay gente en youtube que advierte que la calidad, de lo que no se ve a simple vista no es igual que la de una marca tradicional.
Tuve oportunidad de ver por dentro un Jetour dashing y un Exceed y son sorprendentes para el precio, pero ese precio bajo por alguna parte tiene que salir, no es magia.
Pienso que el dia que un auto chino este tan bien hecho por debajo como un mazda o un toyota, o traen menos equipo o seran mas caros.
Hay una tendencia a creer que el precio más bajo puede ser por tener menor calidad en general y si bien ese puede ser un factor, creo que la situación es más compleja que eso.
La industria china tiene un volumen que les permite jugar mucho con los costos. Por ejemplo, los autos tienen piezas que no se fabrican dentro de la fábrica misma, pero provienen del mismo país.
Luego, están los incentivos estatales y la gestión misma del estado en conglomerados como SAIC y Faw, por nombrar dos de los grandes. A eso, sumarle los costos de producción en términos de sueldo, no es lo mismo un sueldo promedio a un operario en China que en Hungría o Turquía. Y esto hablando de europa oriental donde los costos son relativamente más bajos que en otros países, ni pensar en fabricación japonesa o americana.
Todo eso en la suma permite bajar los costos. Es más, también podemos poner el caso al revés: autos de marcas tradicionales cuya calidad es muy cuestionable, pero que se paga un sobreprecio. Ese sobreprecio es solo por pagar la marca, o porque esa marca no tiene la capacidad de recortar costos por todos los factores anteriores? Complicado asunto.
Mi experiencia hasta ahora entre autos japoneses, mexicanos, turcos, brasileños y chinos que han pasado por mi familia dice que la mayor cantidad de cachos los han dado autos japoneses (un Mazda 323 y una Rav4), que no se si habrán sido hechos en Japón pero en los que todas las panas han sido demoronas y caras: computadores y cajas de cambio. Y el más fiable que tuve por lejos fue el Suzuki SX4, que en 10 años jamás me dio un mísero problema mecánico aunque estaba a un portazo mal dado de quedarme con la puerta en la mano
