Tal como han dicho, esto es algo que se da en TODAS las actividades, sin excepción.
En el caso de la mecánica, en lo que sí concuerdo, es que resulta complicado encontrar un mecánico de confianza, en especial para aquel que no tenga conocimientos de mecánica. A veces, para poder entenderse con el taller (sea taller independiente o concesionario), igual resulta necesario saber un poquito. De hecho cuando volvimos a tener vehiculo en casa después de bastante tiempo igual encontré necesario ir aprendiendo lo básico. Ahí ya se tendría una cierta base para ir profundizando en busca del diagnóstico del problema que se tenga, y así evitar carriles innecesarios. Sino, el primer problema se situaría entre el volante y el asiento por no entender las funciones básicas del vehiculo, por ejemplo, el tablero de instrumentos, explicación de síntomas que produzcan funcionamiento errático, etc.
Así como hay de todo (entiéndase buenos y malos mecánicos), son estos últimos los que enlodan de alguna forma a sus pares, y que de ahí se diga que "todos" son sinvergüenzas y poco profesionales. Sólo doy a entender lo que ocurre en este aspecto que provoca que la mala imagen se generalice.
Otro alcance sobre algo que también ocurre, y que me ha pasado, es que a veces las fallas posteriores se producen por apurar la ejecución del trabajo, si el cliente diera un poco más de tiempo (cosa que por lógica no todos son proclives a hacer) es mucho más probable que el problema quede resuelto de una sola vez. De por sí no es facil decidir esto, ya que como uno como cliente es desconfiado y el auto pasa a ser una herramienta de trabajo, por ende se solicita el vehículo lo antes posible por temor a que durante ese tiempo requerido no se le haga nada al auto y quede botado en el taller.