
La misiva, que ocupa dos páginas en La Tercera y una y media en El Mercurio, dice que:
"Con motivo de la formalización del padre John O'Reilly, los abajo firmantes hemos querido compartir con la opinión pública el contexto en el cual hemos conocido a la persona y la obra de este sacerdote". Son más de mil las personas que firman la carta para para apoyar al sacerdote de los Legionarios de Cristo, una de las congregaciones religiosas más poderosas y cuestionadas presentes en el país, que es conocida por estar presente en los actos religiosos de los empresarios y familias más ricas del país. Son conocidos como los curas de los "poderes fácticos" por su cercanía también con el diario El Mercurio.
Entre los que firman está el presidente del Consejo Nacional de TV, Herman Chadwick, hermano del ministro del Interior y primo del presidente de la República. El polémico hecho se da a un par de días de la formalización del cura en la Justicia, tras la denuncia que pesa en su contra por abusos a menores en el Colegio Cumbres de la comuna de Las Condes.
“
desde hace más de veinte años ha trabajado en Chile, y cada uno de nosotros ha podido presenciar la forma en que ha servido a la comunidad. Con los niños, entre ellos nuestros propios hijos, fue siempre acogedor y alegre, guiándolos para que amaran a Jesús, transmitiéndoles un mensaje sencillo, mil veces repetido, que buscaba desarrollar en los niños los valores básicos del amor a Dios, a la Patria, al prójimo y a la Familia”.
Y añade: “
Con los jóvenes, acompañándoles y guiándolos con infinito respeto y delicadeza. Siempre disponible para oír cada problema, tratando que sus pasos no se alejaran del camino de amor a Dios, que ha sido siempre su razón de vivir”.
“Cuando dolores y penas profundas afectaron nuestras vidas y a nuestras familias, él estuvo siempre ahí, con su presencia, con su oración, acompañándonos, No sólo estaba al servicio de quien podía necesitarlo durante sus extenuantes jornadas habituales de trabajo. ¡Cuántas veces lo vimos renunciar a su escaso tiempo libre, porque quería acompañar a alguien que sufría o que estaba solo o angustiado”.
Finalmente, la misiva expone que “
no podemos callar frente al dolor infinito de un hombre inocente imputado por el más vil de los delitosos”, indica la carta de apoyo al ex capellán de los Legionarios de Cristo, que acumula más de mil firmas.