Ahora les cuento el motivo, ya que en nuestro país es normal darle mas de 30 mil km a los neumáticos en un auto de calle que solo anda en asfalto.
Hasta los 20 mil km el auto anduvo a la perfección, luego empece a notar un desgaste irregular en las ruedas delanteras, lo lleve al concesionario, lo revisaron entero supuestamente y encontraron todo ok.
En la manutención de los 30 mil el problema es peor, lleve el auto a alinear y corrigieron unos grados, fui a reclamar al concesionario, lo toman para revisarlo nuevamente y ellos hacen una "pequeña corrección", me lo entregan inmundo, cochino, negasen esperar hora y media por un lavado que al final nunca hicieron.
Me lo entregan "corregido", con el volante mirando unos grados a la izquierda, al soltaron en carretera se va a la derecha y mas encima a 120 el volante vibra como maquina corta patillas.
Lo lleve nuevamente a mi serviteca de siempre a corregir de nuevo ya que en el concesionario me tramitan mucho y comprobamos que habían alineado y balanceado como el forro, y con las medidas de la carrocería anterior que son algo diferentes (en el manual sale los valores correctos y no son los que da la maquina en su base de datos hasta 2009). Vuelta a pagar por la corrección.
Reclamo y exijo neumáticos en garantía en en concesionario, nuevamente se hacen los tontos y no dan ninguna solución, mas encima no saben nada técnico y creen que los clientes son todos retrasados mentales?
Carta reclamo a Subaru Santiago, se hacen los lesos.
En la manutención de los 15 mil me entregan el auto rayado porque parece que apoyaron y arrastraron una caja sucia sobre el capot, se hacen los tontos y prosean pasta, mas encima el pendejo que leva los autos no encontró nada mejor que pasarla escobillón al parachoque para sacarle los moscos.
Los neumáticos están tan cagados que en su borde interno casi muestran la malla, triamos y corregimos y quedo ok , era por un mal trabajo de alineación.
Por eso tuve que comprar neumáticos, el auto lo tendré hasta enero de 2012 y será cambiado, y no va a ser por un Subaru, no se si la culpa es del auto o del concesionario o mía, no creo ser tan negligente para no haberme dado cuenta.
No me nombren a Subaru al menos por este anio.
Voy a crucificar al maldito auto.Y al concesionario.