Uff. Cirugia mayor para instalar un chiche me parece mala idea.
Respecto a la relación precio/calidad. El precio estaría justificado si hubiesen atendido el reclamo principal de la generación pasada, el hecho que el motor fuese anémico.
Por ahí leí un review de una página gringa donde le reclaman abiertamente a Subaru por la falta de potencia del motor y responden que están evaluando ponerle turbo al modelo. Probablemente el motor DIT 1.6T le quede perfecto.
Intento pensar motivos de por qué insisten en hacer el auto más lento de lo que uno esperaría y se me viene a la mente los siguientes motivos:
- Regulaciones CAFE de rendimiento en USA (El turbo dañaría mucho las cifras de la marca). Subaru es una marca cuyo volumen de ventas se hace en USA.
- Confiabilidad/Orientación más off road de Subaru vs los SUVs urbanos de las otras marcas. Tal vez consideren que el turbo no es lo suficientemente fiable para ponerlo en un auto tan masivo y que el hecho de que además el auto tenga un poco de orientación off road podría derivar en que bajo este uso haya mayor probabilidad de falla que cubrir por garantía lo cual impactaría mucho en los costos.
- Simple y llanamente costos. Un motor turbo es más complejo y por ende más costoso de producir, sumado a esto, la transmisión CVT tendría que pasar a ser la versión de alto torque lo que seguramente dispararía aún más el costo del auto y lo haría perder competitividad. Hay que recordar que Subaru es una marca con ensamble en japón y en USA solamente y tiene que competir con marcas como VW y Ford que arman en México, China y otros países de mano de obra barata y que tienen muchos mayores volúmenes de venta globales o tiene que competir con Mazda/Toyota que son marcas cuyos SUVs 4x2 hacen un 80% de las ventas. Además, en estas marcas los modelos CX5 y Rav4 incorporan motorizaciones 2.0 que son tanto o más lentas que la del XV y no veo a nadie reclamando mucho por ello.
Subaru tendría que renunciar al AWD que es su identidad de marca para poder competirle en costos de producción y arriesgarse a perder su espacio de nicho de mercado donde vende mucho, por ejemplo, los estados nórdicos de USA.
Todos estos motivos sumados en cierta medida vs los excelentes volúmenes de venta que tiene el modelo, no creo que les resulte atractivo financieramente de cambiar ya que la mayoría de los compradores realmente no se fija en cuanto acelera un auto antes de comprarlo si no que priorizan look, equipamiento y equipo de seguridad. Somos los entusiastas y la prensa especializada la que critica que los autos no son lo suficientemente "rápidos" después de todo.