(continuación de
http://www.conducechile.cl/sitio/foro/ruedas/prueba-toyota-auris-hybrid/)
“Un Golf va a ser interesante” me rondaba la cabeza. Como no conducir en las carreteras para las que se diseñó al compacto más vendido y el que sirve de referencia a vencer por parte de la competencia?
Curiosamente, encontrar un Golf de alquiler no resultó fácil, pero nada que un par de llamadas no pudiera resolver.
El modelo en cuestión:
Volkwagen Golf A7 1.4 TSI 122 CV DSG 7 Bluemotion
Fabricación: Alemania

Bluemotion es un conjunto de soluciones creadas por VW para obtener consumos más bajos y menores emisiones contaminantes. Dependiendo de si el motor es a gasolina o diesel, variará las tecnologías a incluir. En el bencinero debiera incluir neumáticos de baja resistencia a la rodadura, Start & Stop, spoiler trasero para mejorar la aerodinámica, entre otros.
Al momento de ir a buscarlo desde la estación de Sants:

Este es el trayecto –ida y vuelta- que le espera:

Al subir, la primera impresión y que se mantiene durante los 1.500 kms de recorrido es un aura de calidad. Todo se nota bien hecho, bien ajustado, casi todo bien diseñado. El Golf transmite calidad:







El andar se siente sólido y silencioso, hay poco ruido de rodadura y está muy bien filtrado el ruido del exterior en especial en carretera. En esto es mejor que el Auris.
Parte de ese bajo ruido que se filtra en carretera puede deberse al tamaño y forma de los espejos. Lo que no es gratuito pues la visibilidad es muy limitada, son muy pequeños y dan poca visión perimetral. Este Golf viene con focos delanteros halógenos reflectores que tienen una pobre iluminación, quizás mejore con alguna ampolleta de mejor calidad.
La dirección tiene asistencia eléctrica, es bastante pesada lo cual es cómodo en autopista
pero no tienes idea que es lo que pasa bajo las ruedas, el nivel de comunicación es mínimo salvo cuando las ruedas patinan, algo bastante normal hasta que interviene rápidamente el control de tracción (es el testigo del ESP el que se enciende). Si intentas salir rápido de un semáforo incluso no desde 0, habrá por seguro patinazo hasta que interviene el control. Ahí se siente una vibración y ruidos provenientes del tren delantero. Fuera de ese momento no sabes que pasa abajo.
Motor:En una palabra: fantástico. Para tener en el papel “solo” 122 Cv (hay rondando mediciones en dinamómetro y está cerca de los 140 cv reales) corre mucho, mientras más se le exija mejor suena y gasta relativamente poco. Digo relativamente pues es un 1.4 litros de inyección directa y turbo, que a baja carga se muestra económico pero con el trayecto y uso normal no lo es tanto. O quizás si lo es pero comparado al Auris híbrido las diferencias son notorias.
La entrega de torque es alta y plana desde abajo, funciona muy bien en ciudad y recuperaciones.
Pasando a Francia y llevando una velocidad como la indicada y manejando con suavidad, este rendimiento es de los mejores conseguidos:

En Francia comienzan una carretera de tres pistas por sentido y la máxima es de 130 Km/h, pero con continuas reducciones por trabajos a 90-100 km/h.
Te reciben no solo con los brazos abiertos, también con todos sus sucesivos peajes:

El primer destino se va acercando: Marsella, la segunda ciudad en importancia mercantil y de población de Francia:

Manteniendo cruceros entre 100 y 130 km/h la temperatura del aceite ronda los 100ºC:

El Garmin se convierte en el mejor amigo de viaje:


Consumo medio obtenido entre Barcelona y Marsella. Corriendo poco, los franceses tienen radares en todos lados.
Según GPS, la velocidad máxima fue de 207 Km/h, el 1.4 se sentía que tenía fuerza para dar algo más. Peculiar pues la máxima indicada por el fabricante es de 203 km/h.

Con el tráfico citadino comienza el funcionamiento del Start & Stop, que sumado al al funcionamiento del cambio automático de doble embrague –DSG- pasan a ser un asunto. Este botón se convierte en uno de los más utilizados:
El funcionamiento del S&S termina por cansar.Intenté utilizarlo el mayor tiempo posible pero en el tráfico pesado de Barcelona o aún peor de Marsella y Niza, termina desesperando.
No solo porque no es rápido de activar (de volver a encender el motor que además no tiene buen sonido al encender),
también por el funcionamiento en ciudad del cambio. No es suave, tironea y vibra. Entonces se suma que estás en el tráfico con motor detenido, el motor no se enciende al quitar el pie del freno, debes acelerar lo que significa que el motor se enciende de golpe y que la caja “mete” el cambio, el resultado es un avance brusco que no se condice con la calidad general del Golf, la suave firmeza de la suspensión, la buena modulación de los frenos, casi pasan a segundo plano con el S&S – DSG. Si a eso se suma que el aire acondicionado al estar el motor detenido pasa a oler mal y que los vidrios se empañan (hubo algo de lluvia), definitivamente desactivas el S&S.
Donde la caja si se luce es en aceleraciones fuertes. Se vuelve adictiva. Mientras más se pise el acelerador, mejor se comporta. Salir de un peaje en el modo Sport a fondo –de ahí entonces las continuas entradas del control de tracción- solo para ver cuanto demora en un cambio a otro y ver la forma en que cae y sube la aguja del tacómetro y lo mismo al bajar de marcha para utilizar el freno de motor- que hay que decir que ofrece poco frenado- es una gozada.
Es hora de repostar:



Luego de 741 km, casi la totalidad en autopista el consumo ha sido:
15,3 km/lSería vergonzoso quedar sin gasolina en Mónaco…

El tráfico pasada la curva de Santa Devota no deja subir la famosa recta del Gran Premio como se quisiera…



Le Golf…


Es hora de volver a Niza

Al hotel:

A la mañana siguiente, le Golf en Cannes:

Lamentablemente no quedaban habitaciones:

Algo de lluvia se acerca:

Un detalle curioso es el excesivo ruido que hace el motor del limpialuneta trasero. No es la goma, es el motor.
Curioso este Land Cruiser, parecía salido del mar:


Hay un indicador del consumo de ciertos accesorios:

Compañero de estacionamiento:

Antes del regreso a Barcelona, una parada en Arles:



Donde de alguna forma y gracias a los sensores de estacionamiento delantero y trasero el Golf logra hacerse paso por calles en los que un Smart va justo:
El rendimiento ha disminuido. Se ha visto afectado por el tráfico citadino de ciudades como Niza y Mónaco y el ritmo más alto en carretera:

El GPS indica que falta poco para encontrar una gasolinera sin tener que entrar a una ciudad y según la autonomía hay todavía espacio para seguir rodando más rápido:

Pero no, la autonomía comienza a descender rápidamente, le falta bastante exactitud.

Por lo que hay que bajar el ritmo, velocidad crucero a 100 Km/h de GPS:

Hasta que se puede respirar nuevamente:

No hay foto del rendimiento pero
fue de 13,5 Km/l…Ya queda poco para devolver el Golf:

Rendimiento del trayecto final, un 90% de autovía y el resto tráfico de ciudad de viernes por la tarde:

Mucho conducir, es hora de ir de tapas…
